martes, 24 de mayo de 2011

El Anguila

Texto publicado en @librediario el 12 de mayo de 2011.

Sus movimientos atléticos le permitían escalar lo que se proponía. Se movía como un gato en la oscuridad de la noche. Sigiloso pero efectivo, solitario pero letal. Siempre lograba su objetivo macabro. Sus ataques se habían convertido en un ritual truculento. Repetía cada dos meses esa rutina obsesiva y perversa. Después paraba un tiempo. Descansaba, hacía changas como soldador y, una vez más, volvía a atacar. Así fue la vida de Marcelo Angel Fasano estos últimos años. El Anguila -como le decían en su Escobar natal- vivió al límite. Se había ganado ese apodo a fuerza de movimientos electrizantes. Era imparable, igual que las “anguilas de río”, las mismas que pueden emitir descargas terribles para cazar a sus presas. Así era Fasano. Pero un día, su seguidilla furiosa se terminó.

Ayer un investigador me acercó parte del expediente. Estuve horas leyendo los testimonios de las víctimas. Recorrí sus relatos escalofriantes. Descubrí a un personaje de conductas compulsivas y aberrantes. No recuerdo antecedentes de un violador serial como éste.

Desde 1995 hasta el año 2009 violó al menos a 51 mujeres en 42 hechos distintos, ya que en algunas oportunidades atacó en forma conjunta. Este número no se extendió porque El Anguila estuvo preso cuatro años. Cayó por robo. En Devoto nadie se enteró de que era un violador compulsivo sino sus días hubieran sido interminables.

La modalidad sorprendió a policías y funcionarios judiciales. Actuaba como un "hombre araña" que escalaba e irrumpía a los departamentos en horas de la madrugada mientras las víctimas dormían. Las ataba de pies y manos, vendaba sus ojos para que no lo vieran y el algunos casos elegía con que ropa interior las ultrajaba.

Esta semana comenzó a ser juzgado por cinco casos ocurridos en la zona norte del Gran Buenos Aires. Es sometido a proceso ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 5 de San Isidro, integrado por prestigiosos jueces como Raúl Alberto Neu, Mario Eduardo Kohan y Ezequiel Igarzábal.

Fasano llegó preso al debate. Acusado de cinco casos de "abuso sexual con acceso carnal" y "robo calificado por el uso de armas y escalamiento". Los hechos ocurrieron en 1998 y 1999, en las localidades bonaerenses de Olivos, Martínez y San Fernando. En la práctica, las pruebas colectadas exponen una conducta de sometimiento sexual gravemente ultrajante. En casos como éstos la teoría penal describe como la ausencia de la voluntad de la víctima es reemplazada por la del criminal. También se hace referencia a la prolongación en el tiempo del abuso y al carácter degradante que los hechos pueden tener para las mujeres sometidas.

Todo esto describe a El Anguila.

Fasano se encuentra procesado con prisión preventiva por otras 11 violaciones cometidas en Capital Federal. De acuerdo a la investigación, el imputado cometió los ataques en dos períodos distintos: entre 1995 y 2001 y entre 2007 -cuando salió de la cárcel-, y 2009.

Los detectives los descubrieron porque fue dejando rastros en cada ataque. Ayer sentado en el banquillo de los acusados escuchó petrificado la acusación. Quedó mudo, tiezo. Cómo sus víctimas después de cada violación.

1 comentario:

Anónimo dijo...

HOLA EN CAMPANA EN EL BARRIO DALLERA EN LA CALLE CHACABUCO DONDE ESTA LA ESCUELA HAY DIAS QUE APARECE UNOS DISTRIBUIDORES DE DROGA, EL INTENDENTE QUE VIVE EN LAS CALLES INGENIEROS Y MAIPU ESTA METIDO TAMBIEN EN DISTRIBUCION DE DROGA, TE ESCRIBO POR QUE NADIE HACE NADA. LOS PIBES POBRECITOS ANDAN CADA VEZ MAS LOCOS Y NADIE LOS AYUDA.